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Cooperativa de vinos ecológicos de Euskal Herria
12 marzo 2020
“El lenguaje es vino en los labios”, escribió Virginia Woolf, palabras que cobran vida en los componentes de Biba Ardoak, cuando declaran: “Amamos la tierra y vinificamos con respeto la uva y el vino”.
EL logo de la nueva cooperativa sobre un viñedo con uvas.
“Somos viñerones y viñeronas vascas. Practicamos la agricultura ecológica combinando tradiciones artesanales y conocimiento actual. Nos hemos unido en Cooperativa para ser independientes y distribuir vinos que rebosan vida y placer”.
Es la carta de presentación de Biba Ardoak, la Cooperativa de Distribución de vinos ecológicos, biodinámicos y naturales que agrupa a CATORCE vitivinicultores de Euskal Herria, tres de los cuales pertenecen a Rioja Alavesa.
FOTO de Familia en la presentación de Donostia, el pasado 2 de marzo.
El impulsor de este nuevo proyecto es el navarro Arturo Villanueva Arteaga, gerente de Biba Ardoak, que se está entregando en cuerpo y alma, habiendo presentado la Cooperativa el pasado 2 de marzo en Tabakalera (Donostia), pensando en hacer lo propio durante este año 2020 en Pamplona, Bayona, Biarritz, Bilbao, y Vitoria-Gasteiz.
ARTURO Villanueva, gerente de Biba Ardoak, en el bar bistrot Lurlan de Tolosa.
Es hermoso escucharle contar a Arturo ese momento en el que fue visitando todas las bodegas a lo largo y ancho de Euskal Herria, contando uno a una de los viñerones y viñeronas vascas el proyecto:
“Les animaba a participar cuando, de repente, lo más emocionante era ver cómo se les iluminaba la cara, y se les encendían los ojos…”
«SE les encendían los ojos», dice Arturo, como los de Itxaso, una de las catorce de Biba Ardoak.
Han comenzado ya a recorrer su camino, de igual manera que aún tienen mucho por hacer.
«Cómo me caí en el barril de vino natural…»
.- Arturo, cuéntanos cómo nació y se puso en marcha Biba Ardoak.
Durante los últimos cinco años he sido hostelero en Ciboure en mi pequeño bar bistrot Maitenia, en Iparralde. En Maitenia era un impulsor del “KM 0”, con pequeños productores de vino, agricultores, pescadores, pequeños ganaderos que trabajan de manera ecológica o natural en un radio de 100 kilómetros.
.- El bar se llamaba Maitenia… Maite Enea supongo.
ARTURO Villanueva (a la dcha., de pie), hace dos meses en su despedida del Maitenia.
Durante cuarenta años ese bar histórico en Ciboure lo llevó Maite. Cuando yo lo compré tenía otro nombre, pero quise recuperar aquella historia de comunidad y de servicio al pueblo. Así que le pedí permiso a la abuelita que ya es Maite, a ver si podía poner su nombre en homenaje a ella, Maitenia, la Casa de Maite.
.- ¿Cuántos vecin@s hay en Ciobure?
Unos 7000 habitantes.
.- Sigue con el relato, por favor.
Con esa filosofía del Slow Food y el KM 0, nuestros vinos provenían de pequeños vitivinicultores independientes y ecológicos, biodinámicos y naturales. A través de todo esto, he conocido el fuerte movimiento que existe de pequeños Viñerones ecológicos, biodinámicos y naturales en el conjunto de Francia, y así me caí en el barril del vino natural.
.- Como Obelix en la poción mágica, jaja.
Sí. Y no he podido ya salir de él. Este movimiento había llegado muy fuerte a Cataluña. Euskalherria no estaba en un momento tan avanzado. Así que decidí crear algo en positivo. Ahí empezó a crecer la idea, hablando en Euskalherria con los viñerones, buscándolos allí donde estuvieran.
ARTURO presentando en público el proyecto por vez primera, en Tabakalera (Donostia).
.- ¿Cuál era el planteamiento que tú les trasladabas?
Si hasta ahora ha sido más sencillo para ellos exportar ese vino, mi idea es que ese vino de aquí se lo beba la gente de Euskal Herria. Mi idea era crear una distribución que no existía, una alternativa que sana, comprometida con la tierra y con vinos honestos y de verdad. Queríamos dar esa alternativa a nuestro pueblo y a los hosteleros.
.- Ahí es donde surge la Cooperativa de Distribución de estos vinos…
Eso es.
.- ¿En qué sentido es Cooperativa?
PÚBLICO asistente al acto de presentación de Biba Ardoak en Donostia.
Hemos adoptado esta forma empresarial por ser la más coherente con nuestra forma de pensar, con apego a la tierra y con el deseo de creación de riqueza en nuestros pueblos y comarcas, además de la participación directa y democrática de los propios viñerones en el proyecto.
.- ¿Cuántos sois hasta la fecha?
Somos 14 proyectos diferentes de todo Euskal Herria, más la parte logística que aporta la Asociación de Pequeños Productores Lurlan (Trabajo de la tierra), que llevan ya veinte años de existencia. Son pequeños productores de sidra, leche, de queso, de vacas… que tienen ya toda la logística montada. En su ADN llevan el participar de proyectos como el nuestro.
.- Háblanos de esos catorce, y especialmente de los tres viñerones de Rioja Alavesa
LOCALIZACIÓN de los catorce de la Cooperativa en un mapa de Euskal Herria.
Sí, tenemos tres en Rioja Alavesa: Saúl Gil Berzal, de Laguardia; Itxaso Compañon y Gorka Mauleon, de Lanciego; e Iker García, de Labraza, que acaba de empezar y es un mago, aunque él diga que “no tiene ni idea”.
.- El resto de viñerones…
Están los hermanos Llorens, de la Bodega Biurko Gorri, de Bargota (Navarra).
.- Le entrevisté para el Blog hace tiempo
Estuviste con Ramón, ya leí aquel artículo, porque tenéis muy bien posicionado el Blog Rioja Alavesa en Google, pero está también su hermano Fernando.
BODEGA familiar de los Llorens, en Bargota, que elaboran vino para 200.000 botellas.
Siguiendo en Navarra, en Lakar están los hermanos Edorta y Raul Lezaun, en la bodega Lezaun, en el valle de Deierri, a diez minutos de Estella-Lizarra. Luego pasamos al este de Navarra, donde en Aibar tenemos a Imanol y Vitorino Ibero (Bodega Mendiko). En Lumbier tenemos a Aristu y Azpea.
Luego en la Baja Navarra (Iparralde) tenemos a Elorri y Brice, con su proyecto Bordaxuria, en Izpura, que forman parte de la DO Irulegi. De esta misma DO, tenemos a Bixintxo y Pascale, de Bordatxo, y a Paul Karrikaburu e Espila
Ya en Gipuzkoa está Luisja de Urkizahar, en Beizama. Y en Bizkaia están los hermanos Iker y Asier, que son pastores, que hacen queso Idiazabal, y elaboran txakoli de Bizkaia, bajo el nombre Ulibarri Artzaiak, en Gordexola.
LA palabra BODEGA escrita en alguna de las casas de los pueblos navarros.
.- ¿No tenéis txakoli de Araba?
Es la única que nos falta, pero todavía no hay nadie que haya dado el paso para trabajar en ecológico, esperemos que con la creación de Biba Ardoak haya viñerones que se animen a trabajar y certificar de esa manera.
.- El vuestro es un proyecto cooperativo y abierto a otros.
Exacto. Confiamos que en el futuro muchos más viñerones se incorporen y lleguen a ser una referencia para las nuevas generaciones, inspirándoles y haciéndoles ver que se pueden hacer las cosas de otra forma.
.- ¿Cómo surgió el nombre de Biba Ardoak?
CARTEL de invitación para el acto del pasado día 2 de marzo en Donostia.
Se le ocurrió a la gente de una agencia de comunicación con la que estamos trabajando. Surgió en uno de nuestros debates cuando estábamos hablando del proyecto, viendo los valores que nos inspiran.
En aquella reunión nos dimos cuenta de que el concepto central de nuestro proyecto era poner la vida en el centro, por delante de especulaciones, una vida comprometida sin agentes químicos, de viñedos ecológicos que rezuman vida por todos los lados, de vinos vivos que forman parte de la celebración de la vida…
Todo esto le llevó a uno de los compañeros de la agencia, bertsolari por cierto, a ofrecernos el nombre de “Biba Ardoak”.
DECLARACIÓN de intenciones, una proclama en toda regla.
.- Me han dicho que en su día tuviste problemas en el bistrot Maitenia con los pedidos que hacías de vino ecológico…
Más que problemas, era una cuestión de logística, pues nos resultaba muy complicado hacernos con todos los vinos que queríamos. De ahí que ahora nos hayamos organizado. Me daba coraje pensar que en los bares de Euskalherria no podían beberse vinos ecológicos. Ahora, con nuestra asociación, podemos servir a cualquier hostelero de Euskalherria que nos lo pida.
.- ¿Quiénes fueron los pioneros en todos estos movimientos en otros lugares del mundo?
ALGUNOS de los vinos que forman parte de la Cooperativa.
El movimiento del vino natural nace en los años 70 en el Beaujolais, en Francia, con Marcel Lapierre. En los 80 llegan a París. Poco a poco se fue extendiendo por todo Francia, y el resto del mundo. Es un movimiento de gente neo rural muy fuerte, gente que deja la ciudad…
Pero también viñerones como los nuestros que ya en los años 90 reflexionan sobre el daño que han hecho los químicos industriales, los herbicidas, los pesticidas, y ahora son ya las nuevas generaciones las que toman el relevo con conciencia.
Como han hecho Gorka e Itxaso en Lanciego. Ella iba camino del mundo del cine, y él en la informática, decidiendo hacer una apuesta por la vida cuando falleció la ama, luego el aita y el tío de Itxaso, volviendo a casa y poniendo en pie de nuevo el viñedo para elaborar el vino de forma ecológica.
ITXASO Compañon con otro de los miembros de la Cooperativa Biba Ardoak.
.- ¿Crees que los consumidores de vino saben lo que son vinos naturales, ecológicos o biodinámicos?
No, de ahí que creemos la Cooperativa con dos objetivos.
Uno, esa labor logística y comercial para proponer una alternativa a hosteleros y consumidores. Y dos, crear un movimiento por una nueva cultura del vino que sea sana, viva, saludable y popular, recreando una cultura histórica de nuestro pueblo del vino hecho como es debido.
.- Dime dos frases de los vinos naturales…
Para empezar, los vinos ecológicos, biodinámicos y naturales reflejan absolutamente de forma fiel la tierra, la uva y el clima, sin trampa alguna.
Los vinos naturales son zumo de uva fermentada, al que ni se le ha quitado ni se le ha añadido nada.
.- De los vinos ecológicos.
Se admiten algunas cosas, como pueden ser añadir sulfitos en cantidades más bajas que el convencional, siendo una agricultura en la que no se añade ningún químico, ni herbicidas ni pesticidas.
.- ¿Y los biodinámicos?
SAÚL Gil Berzal trabajando con la mula en sus viñas de Rioja Alavesa.
Esta es una agricultura más coherente y comprometida que tiene en cuenta la viña como un ser vivo que es parte de la biodiversidad, en la que hay otras plantas, insectos, otros cultivos, teniendo en cuenta el calendario lunar, haciendo los mismos preparados en casa.
En la ecológica puedes comprar ciertos preparados ecológicos, pero la biodinámica va más allá. Al final es lo que han hecho nuestros antepasados durante siglos.
.- Llama la atención escuchándote que no seas agricultor, ni enólogo…
Lo que soy es un amante de los vinos auténticos. Un hostelero y consumidor que se ha enamorado de los viñerones y de estos vinos que no tienen nada que ver con los vinos convencionales.
CATAS, como esta de Dic pasado, donde se abrieron botellas de vino de toda Euskal Herria.
.- Pero tú no tienes ni 500 metros cuadrados de viña
Nada. Por tener, no tengo viñas ni en la terraza de mi casa, jajaja. Ni una cepa.
.- ¿Cómo les ves a tus 14 viñerones?
Cuando en su día fui a sus bodegas, uno por uno, a contarles el proyecto y animarles a participar, lo más emocionante fue ver cómo se les iluminaba la cara, y se les encendían los ojos. No era una sorpresa, porque muchos de ellos acumulaban mucha frustración al verse obligados a exportar porque nuestro pueblo no había respondido como debiera a su trabajo.
IKER García, el único bodeguero de Labraza, con dos de sus vinos.
.- ¿Tienen futuro los vinos naturales, ecológicos y biodinámicos?
No es que lo diga yo, sino que lo dice la propia gente que los conoce, los gurús y los expertos de vino, y la propia industria del vino a nivel mundial.
Es el cambio más significativo en la industria del vino en los últimos diez años. Tanto, que bodegas industriales están sacando alguna línea de vinos en ecológico, incluso en biodinámico, para hacer negocio.
.- ¿Y los restaurantes?
Los mejores restaurantes del mundo, con estrella Michelín, ya tienen un listado con vinos naturales.
CASI 90 años tiene esta viña de Iker, en Labraza, llamada Miralasbuenas.
Los tres «Biba Ardoak» de Rioja Alavesa
.- Dime algo de cada una de las tres bodegas de Rioja Alavesa
Estoy muy orgulloso de todos los viñerones, pero especialmente diría que de los de Rioja Alavesa, porque estando en una denominación genérica como es Rioja, dominada por grandes grupos y bodegas desapegadas del trabajo de la viña y la tierra, ellos tres han decidido tomar un camino contrario a todo eso.
.- Vamos con tus tres asociados de Rioja Alavesa.
SE siente que Saúl ama sus viñas, sus uvas… en esta fotografía de Vendimia.
Saúl Gil Berzal se inspira en los vinos de Borgoña, asegurando que las tierras de Rioja Alavesa no tienen nada que envidiar al terroir de Borgoña. Hace unos vinos muy elegantes que, además, reflejan su carácter.
En el caso de Gorka Mauleon e Itxaso Compañon, se han entregado al viñedo y a la bodega. Con ese compromiso empiezan de cero y en diez años han hecho un camino espectacular, ofreciendo un vino que es el que más éxito tiene entre nosotros, el Herrigoia, avanzando hacia vinos naturales, sin sulfitos, y elaborando un nuevo vino, El Mozo, que pronto será el de más alta gama de los suyos.
ITXASO con su Herrigoia en las manos, con un nuevo proyecto en su bodega de Lanciego.
.- Nos queda Iker García, de Labraza.
Es el más iconoclasta. Viene participando en Ferias de vino natural del Estado español. Es el más atrevido de todos. Hace pequeñas pruebas e investigaciones con su vino “Hasta que cante el cuco”, del que ha sacado cuatro ediciones, siempre con 300 botellitas cada año.
IKER con dos de sus vinos en su regazo, en una de sus viñas de Labraza.
Es el más joven de todos ellos, con un futuro impresionante, trabajando en agricultura biodinámica, haciendo unos vinos de concentración de fruta, con un poco de sobremadurez.
Entre sus vinos hay un monovarietal de Mazuelo, que venía utilizándose más como uva de relleno que otra cosa. Bien, pues resulta que es un vino natural increíble: puro zumo de uva, brutal para mí.
Desde las primeras palabras de la novelista Virginia Woolf hasta las uĺtimas de Arturo Villanueva Arteaga, hablando de vinos naturales increíbles, la entrevista está llena para mí de un grata sorpresa, a la vez que de una inspiración. Nuestro país es tierra de emprendedores que no dejan de crear sobre lo ya creado.
En un momento de enormes preocupaciones ante la pandemia global del coronavirus, recibir un artículo como éste es como encontrarse una carta serena y vital dentro de una botella lanzada al mar Cantábrico. Ha llegado. La he leído. ¡Biba Ardoak, y toda su gente romántica de honestos ideales!
Eskerrik asko!!!
BibA!, Kepa Urdangarin. Eskerrik asko!
Gran trabajo el que realiza Julio!
Mila esker Kepa por tu comentario que nos emociona también!
Desgraciadamente con la crisis del coronavirus se confirman los análisis y peligros que ya preveíamos hace casi dos años cuando empezamos a reflexionar sobre el proyecto: mercado del vino globalizado, riesgo de crisis sistémicas mundiales, individualización… Ante eso nuestra receta: relocalizar nuestro mercado, tejer redes y alianzas de hosteleros y consumidores locales, situar en el centro los valores y las prácticas que aseguran la reproducción de la vida, trabajar colectiva y cooperativamente, intercooperación y mutualización, asegurar la independencia y la viabilidad-vivavilidad de los proyectos vitícolas de nuestros viñerones y viñeronas, trabajo ecológico-entornos vivos-resilientes, la necesidad de consumir de una forma más coherente, saludable y responsable…etc.
Besarkada kooperatibo eta ekologiko handi bana! Biba bizitza! Biba ardoak!
Eskerrik asko, Arturo Villanueva, de Biba Ardoak. Toda la suerte del mundo para vuestro proyecto. Un cordial abrazo.
Cada bodeguero, como empresario agrícola, busca lo mejor y lo que más se adapta a su filosofía de explotación, con el fin de encontrar la mayor rentabilidad económica. Por eso, entiendo que estén apareciendo nuevos grupos o asociaciones de bodegas de características muy concretas, donde cada uno encuentra su sitio.
Gente joven, emprendedora, con ganas de demostrar lo que hacen y cómo lo hacen, todo digno de mérito. Pero, con todos estos proyectos, entre otras dudas me inquietan las siguientes:
1- ¿No es posible que con estas asociaciones supra Rioja Alavesa, no estemos perdiendo, un poco, la fuerza de la unión?
2- ¿No estamos perdiendo el valor que consideramos a Rioja Alavesa?
Son dudas, que seguro más de uno, podrá aclararme y darme una explicación que me haga sentirme, de nuevo, tranquilo y saber que, en lo importante, todos seguimos remando juntos.
En estos momentos tan especiales, a todo el sector vitivinícola, mis mayores ánimos y mi comprensión.
Muchas gracias, F. Bujanda Ciordia. Un cordial abrazo.
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